miércoles, 15 de abril de 2009

Un abrazo para un gran Caballero: Don Joaquín Olivera Peña


Desde estas líneas queremos rendir homenaje a la figura de uno de los jinetes más laureados en la historia de nuestra hípica, Don Joaquín Olivera Peña, Jinete y Caballero, con mayúsculas, ejemplo a seguir por todos los aficionados al caballo en general y de la monta vaquera en particular.




Poco hay que decir sobre su figura, su forma de montar y de ir de frente en todos los aspectos de la vida. Las hemerotecas y archivos recogen antiguos ejercicios sobre sus caballos y yeguas que emocionan, de la misma manera que al buen aficionado a los toros llega a emocionar contemplar viejas faenas de Curro Romero.




Joaquín Olivera continúa impartiendo su magisterio en clínics a los que acuden decenas de aficionados interesados en oírle y aprender del maestro. Actualmente está apartado de las pistas pero son muchos los que sueñan con su vuelta. Nosotros tambien daríamos lo que fuera por verle otra vez en los concursos.




Pero lo primero es lo primero, y antes Joaquín debe recuperarse de un achaque que le tiene un tanto descompuesto. A él y a todos sus amigos.




Y ese es el único motivo para que le enviemos este abrazo sincero y lleno de cariño. Para desearle una pronta recuperación y para que sepa que somos muchos los que le apreciamos...y le esperamos. Ahora más que nunca.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Viva Don Joaquín Olivera y la madre que lo parió. A recuperarse, ¡MAESTRO!. Me sumo a lo que han escrito.

Curro

Anónimo dijo...

Ánimo, Don Joaquín. Un saludo de Leonardo.

Anónimo dijo...

Soy un partidario de Joaquín desde hace muchos años y me ha emocionado lo que he leído. Ojalá no sea nada. Arriba MAESTRO Le queremos. Rafael.

Anónimo dijo...

Animo para Don Joaquín Olivera. Un saludo de Agustín para todos los aficionados.

Anónimo dijo...

Don Joaquín Olivera Peña, grande entre los grandes. Larga vida al maestro y que se recupere usted pronto. Fernando.

Anónimo dijo...

Caballo de Oro para Don Joaquín Olivera. Se lo merece de cabo a rabo. Saludos desde Sevilla. Javier.